Por segunda
vez consecutiva, los estudiantes de la Universidad de la Guajira se
rebeldizaron contra las autoridades produciendo una escaramuza que fue sofocada
con gases lacrimógeno en los alrededores del parque-plaza Almirante Padilla.
Los alumnos se
concentraron en la parte externa de la catedral Nuestra Señora de los Remedios
en Riohacha, donde realizaron arengas y hasta cuatro de ellos se subieron a la
zona alta de uno de los gabletes entre las molduras y traserías.
El asunto se
volvió álgido de un momento a otro, en donde los jóvenes fueron perseguidos por
los integrantes del Escuadrón Móvil Antidisturbios, Esmad de la Policía
Nacional, que los disuadió.
Los
universitarios junto a catedráticos, profesores de tiempo completo y
trabajadores hacen muestras públicas del malestar que tienen porque el semestre
fue suspendido.
A la
Universidad de La Guajira la administración departamental le adeuda 57 mil
millones de pesos, que sin importar el embargo de las cuentas realizado, los dineros
no han sido girados; el gobernador encargado, Jorge Vélez García ha reiterado
sucesivamente que no hay dinero.
El mandatario
natural de Antioquia en sus últimos pronunciamientos ha direccionado el
problema hacia los miembros de la Asamblea Departamental, culpando a los
diputados de la crisis económica existente.
