
Independientemente
del estado en el que ingresa el paciente, la atención en salud es obligatoria,
constitucionalmente se debe preservar el derecho a la vida y a la salud, al
retirarme de la recepción le pregunto a la señorita ¿y la medicina prepagada si
la atienden o es todo lo que tenga que ver con Coomeva lo que no atienden? y me
responde “si la medicina prepagada si la atendemos”, entonces por un momento me
dedique a pensar y concluí dentro de mí, qué la salud tiene estrato
socio-económico.
Nuestros
padres, el gobierno, la televisión, la Fifa; toda la vida se la pasan haciendo
campañas antidiscriminación y resulta que ser atendido en salud ahora es un
privilegio, me pregunto ¿Qué es el Fosyga?, ¿Para qué sirve?, ¿Cuántas veces
las clínicas atienden y cobran al fosyga la atención? Y ¿Cuántas veces sin
atender de igual manera han desfalcado este fondo? (con esta última pregunta no
estoy afirmando que esta clínica lo haga), bueno retomemos, en todo caso me
tocó irme de este establecimiento de salud y debí dirigirme a la nueva clínica
Riohacha. la cual se encuentra nuevamente en funcionamiento.
Solo
a las 5:35 am fui atendido por la
recepcionista, quien me entrega una hoja de block para que anote mis datos
personales, tales como: nombre, cedula de ciudadanía, fecha de nacimiento,
dirección, celular, EPS, al poco tiempo me llamó para que ingresara al triage,
muy amablemente la enfermera me atiende.
Allí
me pregunta mi nombre, le respondo me llamo Álvaro Romero, pregunta ¿Por qué viene
a consulta?, le respondo “soy un paciente de 32 años de edad, con hipertensión
y diabetes, además sufro de sinusitis, me tomé una pastilla anoche pensando en
que se me podía pasar la congestión nasal y el dolor de cabeza y sentirme
mejor, pero veo que no, aún sigo congestionado y con dolor de cabeza, me hace
subir al peso, me toma la presión, mide mi estatura y mientras hacía todo este
procedimiento dialogábamos como si fuésemos amigos de antaño, le comento lo
vivido en la clínica Cedes y me dice, nosotros tenemos nuevo gerente y nuestras
directrices es atender a todos los pacientes que lleguen, a lo que le manifesté
“es esa la obligación de la clínica”, “es que uno no debe venir con una bala al
lado del corazón para ser atendido”, al terminar todo el procedimiento me pide
que me siente en la sala de espera mientras ingresa la información para que la
doctora me atienda.
Pasado
un breve rato, soy llamado por la doctora (me reservo el nombre), al ingresar a
su consultorio, tuve que decirle dos veces “buenos días”, porque la primera vez
no me lo respondió, es aquí donde algunos médicos erradamente demuestran ser más
que los demás o de mejor familia, pues en este caso particular lo que no tiene
de estatura, tampoco le fue dado en educación, me siento en una silla y me
pregunta Qué tiene?, le manifiesto lo mismo que dije en el triage, “pase mala
noche, sufro de sinusitis y estoy muy congestionado, además me duele la
cabeza”, a lo que me responde que la atención de esos síntomas es por consulta
externa, de igual manera le respondo, “solo yo sé cómo me siento”, además usted
sabe cuánto demora una EPS en entregar una consulta externa y me responde “si yo
sé, pero también se lo que es una urgencia”, observando esa actitud tan
inhumana e inapropiada no me quedó más que levantarme groseramente y decirle
“deje así no me atienda”, y me dice “ya abrí la historia clínica y debo
terminarla”, me salí del consultorio y me fui sin importarme la historia
clínica.
En
estos momentos mientras redacto este escrito me siento impotente, como la vida
o la salud de un ser humano se ciñe a una cuantificación económica conforme al
régimen de salud o al criterio prostituto de un médico que se le olvida su
juramento por ganarse unos cuantos pesitos en una clínica.
Hoy
recuerdo una frase del común que dice “todo tiempo pasado fue mejor”, yo
recuerdo que estando niño mi papá me llevaba al médico entre ellos donde el pediatra
Cayetano Romero Mora, pagaba la consulta y el médico después de su atención
regalaba hasta la primera dosis del medicamento, porque siempre tenían gracias
a los visitadores médicos, hoy fuera de que todo debe estar incluido en el POS
en muchas ocasiones vas a reclamar los medicamentos y no los hay.
Por
lo que como abogado siempre le he dicho a mi madre, el preámbulo de la
Constitución, debe ser modificado, pues en la actualidad este dice “Colombia,
es un estado social de derecho”, para mi debería decir “Colombia, es un estado
oligarca donde el pobre tiene que morirse”, es triste observar como la crisis
hospitalaria y de salud que solo veíamos en la televisión hoy sea un residente
más del nuevo DTyC del país.
Casi
todos los días observamos pacientes encadenados en las puertas de las EPS, que
si hubiese un ranking en este caso se lo llevara Coomeva EPS, es doloroso
además ver padres de familia o hijos llorando una remisión médica o un
tratamiento, tiene uno que llegar a amenazar a los médicos y/o funcionarios
para que presten el servicio, no es justo que cotizando para un régimen
contributivo tengamos que vivir una situación de esta magnitud.
A
los gerentes de EPS, gerentes de IPS, gerentes y funcionarios de clínicas (Renacer,
Riohacha, Cedes), secretarios de Salud Distrital y Departamental; les digo la
salud no se mendiga, la salud es un derecho, recuerden que ustedes también son
pacientes, pues los médicos también se enferman y se mueren. Secretarios de
Salud Distrital y Departamental, auditen…
Para
finalizar, esta publicación la hago con el fin de que esto no se repita, es
esta una manera de llamar la atención públicamente a la sociedad médica en
general.
Álvaro Romero Hurtado
Exsecretario
de Gobierno de Riohacha