Sin poder
llegar hasta su vivienda por temor por su vida, la de sus hijos y sus restantes
familiares se encuentra la presidenta de la junta de Acción Comunal del barrio
Los Cerezos, Sara Correa Chico, quien por los disturbios ocurridos en el 31 de
octubre en ese sector debió abandonar su casa.
La dirigente indicó
“nosotros siempre corremos el riesgo de amenaza, son unos cargos que nos toca
lidiar con la comunidad, donde hay tantas cosas donde uno no puede decir nada
porque allí viene el peligro, aquí toca el régimen del silencio para poder
sobrevivir”.
En esa
oportunidad ella se encontraba realizando la fiesta de los niños, cuando llegó
el Esmad a cerrar una venta de cerveza en el barrio y a apagar el picó que
sonaba.
Correa Chico anotó
“he tenido el apoyo de la comunidad pero todavía sigue mi casa sola, he estado
en estos 18 días viviendo de aquí para allá, deambulando en el hotel ya quiero
estar en mi casa”.
La presidenta
de la Acción Comunal fue acusada en ese momento de solicitar la presencia
policial y por esta razón su vivienda fue atacada a piedras debiendo abandonar
su lugar de residencia.