Al conocerse las
modificaciones en el tratado de paz firmado entre el Gobierno Nacional y las
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Farc, en La Habana, los conceptos
en La Guajira se conocen públicamente.
La líder wayuu,
Débora Barros Fince, estableció que “retomando el acuerdo final hay dos puntos
favorables como es el tema político, el de suscripciones en nuestros
territorios, 1- Se van a dar las cámaras con municipios de más desplazamientos,
que es para víctimas, desplazados y solo pueden votar en su área y 2- El tema
de género continúa, no ha cambiado, donde nosotros tenemos una participación activa
dentro del proceso de paz”.
Esta abogada, quien
ha representado a las víctimas wayuu de las AUC, se ha desempeñado como asesora
del despacho de la Gobernación, exsecretaria de Gobierno Departamental; asume
una posición sobre el postconflicto.
Barros Fince relató
que “hubo confusión cuando la gente del no generó unas discusiones en las
iglesias, en los colegios y en organizaciones sociales; que fue una desinformación
total, donde en el acuerdo tanto el pasado como el de ahora existen unos grupos
que no podemos desconocerlos que son de enfoque diferencial que tiene su
participación activa”.