Todo ha cambiado anteriormente los
productos, incluidos los alimentos llegaban desde Venezuela, pero la realidad
cambio, ahora las colas de vehículos para llevar insumos se hace desde Maicao
hacia el vecino país en diversas horas.
El problema no es la comercialización de
los colombianos con los venezolanos es el desabastecimiento que deja en algunos
momentos al mercado local, el municipio fronterizo queda a veces sin comida.
Las largas colas de camiones, en las
modalidades de estacas, planchón y furgón se pueden apreciar a la espera de la
autorización del paso por la línea de frontera.
A pesar que está cerrado el paso de
automotores, la fila es incontable para quienes se acercan a Paraguachón, estableciéndose
turnos en Colombia para lograr entrar a Venezuela.