PARTE I
Pese a las labores de búsqueda de los menores de edad, ranchería por
ranchería por parte de brigadas de entidades públicas y privadas, pero el flagelo
de las víctimas por desnutrición continúa su marcha galopante dejando niños y
niñas wayuu muertos en La Guajira.
La preocupación para la comunidad en la península va más allá porque siguen
dándose fallecimientos y se insiste por parte del Gobierno Nacional que se está
haciendo inversiones que superan lo presupuestado cada año.
Sobre la grave problemática se refiere el alcalde de Manaure, Aldemar
Ibarra Mejía, que tiene territorio tanto en la Media como en la Alta Guajira
Aldemar Ibarra. |
Ibarra Mejía indicó que “estamos trabajando de la mano con el Gobierno
Nacional y el Departamental llevando ayudas humanitarias, brigadas de salud y
programas con la Unidad de Riesgo para beneficiar a todas las comunidades. En
el plan de desarrollo lo primero que hemos incluido es primera infancia porque
a los niños hay que darle su lugar”.
De acuerdo con el administrador municipal, la Procuraduría de Infancia y
Adolescencia les exigió que a los niños deban priorizarse en el documento que
es la carta de navegación de los próximos cuatro años.
Manaure hace parte de los tres municipios que conforman el territorio más
extenso de La Guajira, la Alta Guajira que en estos tiempos de sequía por el
fenómeno de El Niño es la más afectada en todo el departamento.