El estadio Federico Serrano Soto es un escenario
deportivo de carácter público que en la realidad termina siendo de uso privado,
puesto a que las dos últimas administraciones distritales cobran un arriendo
para su utilización.
Como podemos observar es notable el abandono en el que se
encuentra la cancha sintética y nos asalta la duda con relación a la finalidad
de los dineros percibidos.
Existe una sensación de inseguridad, hace aproximadamente
3 semanas un padre de familia fue atracado dentro de la misma cancha.
Notamos el ambiente pesado cuando se juega los partidos
del Unión Magdalena en la capital de La Guajira, pues la hinchada de las barras
bravas se vuelven intimidantes con su comportamiento y la Policía solo se hace
presente a raíz de las continuas denuncias realizadas por los ciudadanos,
porque por lo visto las cámaras de seguridad observan hacia otra parte.