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miércoles, 30 de octubre de 2019

CONSTRUYEN EN URIBIA SEDE DE LA FUNDACIÓN LIBÉLULA ROSADA


Con un 70 por ciento de avance hoy se muestran los trabajos adelantados en la que dentro de dos meses serán atendidos los niños y niñas para alimentarlos, como también la atención de las mujeres embarazadas y el adulto mayor.
De acuerdo con la directora de la fundación Libélula Rosada, Lilianeth Mejía Carrillo, la obra corresponde al premió entregado por el programa de televisión la Voz Kid, del canal Caracol.
Las instalaciones se construyen en el municipio Uribia, que tienen un amplio progreso y permitirá recibir a 100 menores de edad, entre los 0 y los 12 años en un comedor comunitario; 60 adultos mayor, y a las madres gestantes y lactantes.

martes, 23 de julio de 2019

LA GUAJIRA FRENTE A LA POBREZA, LA POBREZA EXTREMA Y EL CENSO NACIONAL DE POBLACIÓN


parte I
El Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas, Dane entregó los resultados de la medición de la pobreza y pobre extrema, pero esta vez con una novedad, entregó datos por departamentos, y no por regiones como acostumbraba hacer.
Estos resultados muestran y explican la profunda crisis de La Guajira, donde el 53,7% de la población, es decir, más de la mitad de los guajiros, son pobres, y el 26,7% están por debajo de la pobreza extrema, dejando solo un 19,6% de guajiros catalogados como no pobres.
Igualmente, publicó los resultados de la pobreza multidimensional donde a nivel departamental, La Guajira presenta un indicador del 51,4%, que quiere decir: el 51,4% de los guajiros son pobres multidimensionales, distribuidos en un 34,1% para la población urbana y un 72,5% para la población de centros poblados y población rural dispersa.
A ningún guajiro ni a su dirigencia puede dejar de preocuparle que en educación el analfabetismo en La Guajira alcance un 28,6%, el bajo logro educativo se ubique en un 63,7%, la inasistencia escolar en el 7,1% y el rezago escolar en el 38,7%.
Las barreras de acceso a servicios de salud llega al 7,7% de la población, y el 26,1% no cuente con aseguramiento en salud. En materia de niñez, las barreras a servicios para cuidado de la primera infancia se ubicaron en un 15,8%, en un departamento donde los niños mueren por desnutrición, y el trabajo infantil quedó en el 3,3%.
Alarma que el trabajo informal esté en el 90,3% y el desempleo de larga duración llegue a solo el 9,4%. También genera profundas alarmas que el hacinamiento crítico llegue al 28,1%, la inadecuada eliminación de excretas al 49,4%, y que el 38,5% de la población no tenga acceso a fuente de agua mejorada.
Sí a esto le súmanos los resultados de otros estudios como la encuesta Ensin 2015, que señaló la inseguridad alimentaria en La Guajira superó el 77% y la península ocupa el puesto 26 entre 27 departamentos en el índice de competitividad, es decir, es de las menos competitiva del país lo cual aleja la inversión privada y por lo tanto, la generación de empleo y de ingresos.

escribió:
Mauricio Ramírez Álvarez

martes, 28 de agosto de 2018

13 POSIBLES CAUSAS QUE INCIDEN EN LA MUERTE POR DESNUTRICIÓN DE NIÑOS WAYUU EN LA GUAJIRA


Existe un sinnúmero de dificultades e inconvenientes que a lo largo de los años se han afianzado en contra de los wayuu, porque las soluciones no les llegan, algunas de ellas ni cercanas y más bien lejanas con viso de interminables. Por ello, considero existen estas 13 barricadas que desfavorece a la niñez.
1. Como consecuencia de una enfermedad natural, el niño enferma, deja de comer, se desnutre y muere, puede haber fallas sistema de salud o poco o nulo acceso a los servicios de salud.
2. Como consecuencia de una enfermedad no natural, ejemplo, mala calidad del agua que lleva a enfermedad diarreica aguda, el niño enferma, deja de comer, se desnutre y muere, puede haber fallas en acceso a agua potable o saneamiento básico.
3. Como consecuencia de la pobreza, el grupo familiar no tiene ingresos suficientes para acceder a alimentos, el niño se desnutre y muere por hambre.
4. Como consecuencia de la inseguridad alimentaria y cambio climático, reduce recursos del entorno, disminución capacidad para generar alimentos, sequías prolongadas, pérdida de hábitat sustentable, el niño reduce consumo alimentos, se desnutre y muere.
5. Por invisibilidad, el Estado, Nación-Región desconoce la existencia de estos niños, lo que impide garantizar sus derechos.
6. Por errores en la intervención del problema, desconocimiento de factores culturales, imposición de esquemas ajenos a las comunidades.
7. Por existencia de barreras culturales, idiomáticas de parte de las comunidades y de parte de las instituciones, les impide interactuar en la búsqueda de soluciones.
8. Por aplicar soluciones parcializadas sin cobertura geográfica universal, algunas acciones pueden ser efectivas, pero aplica a un grupo poblacional pequeño y no a todos.
9. Por la alta dispersión poblacional rural, se quiere atender desde los cascos urbanos, cuando la crisis está en los territorios étnicos.
10. Por desconocimiento de la multicausalidad, se identifican solo unas pocas variables, se desarrollan acciones para impactarlas, pero dejan de lado o desconocen la existencia de otras que también influyen en la crisis.
11. Por incapacidad institucional para dar respuesta a las crisis, las instituciones son lentas en su capacidad de reacción, tiene poca capacidad institucional o presupuestal para actuar, se quedan al margen del problema.
12. Por la desarticulación de actores, muchos actores interviniendo, con esquemas diferentes, en territorios diferentes o a veces en el mismo lugar, no se racionalizan recursos, se desperdician y se reducen impactos, a veces generan efectos contrarios a los buscados.
13. Por falta de interés, el problema es visible, pero hay poco interés en enfrentarlo, se acostumbran al problema, termina formando parte del paisaje, deja de generar alertas.

escribió:
Mauricio Ramírez Álvarez

viernes, 24 de noviembre de 2017

LA GUAJIRA REQUIERE INVERSIÓN SOCIAL A LARGO PLAZO Y ES ESTA LA OPORTUNIDAD: MAURICIO RAMÍREZ

Con una carta donde se incluye un total de tres peticiones en materia social, que pueda mejorar las condiciones de vida de los más necesitados donde se incluye los wiwas, wayuu y los mismos arijunas en estado de pobreza extrema, se dirige el exdirector de Planeación Departamental Mauricio Ramírez Álvarez a la nueva gobernadora encargada Tania Buitrago González.
El texto del exfuncionario es el siguiente: “nos urge formular tres planes estratégicos que superen los límites de los propios planes de desarrollo cuatrienales, unos planes de largo plazo, consensuados y concertados y de carácter vinculante para todos en La Guajira”.
La misiva describe las peticiones así: “1, un Plan de Garantías de los derechos de los niños guajiros. 2,        Plan Adaptación al Cambio Climático de La Guajira y 3,        Plan para Erradicar la Pobreza Extrema en la península.
De acuerdo con Ramírez Álvarez todas estas propuestas deben reunir la formulación de un plan integral, de corto, mediano y largo plazo, multisectoriales y multidisciplinarios para garantizar los derechos de la niñez (especialmente rural e indígena), combatir los efectos de cambio climático y el cierre de brechas de la pobreza extrema de La Guajira.
Sostiene el administrador público que “ni siquiera le pido que alcance a ejecutar acciones de dichos planes, solo que logremos formularlos, pero a diferencia de otros intentos, que estos definan hojas de ruta, cronogramas, responsables, entendiéndose como responsables a los diferentes actores públicos del nivel local, regional y nacional, actores privados, incluso ciudadanía en general”.
Afirma el profesional que esto requerirá trabajo interinstitucional, concertar con todas las entidades públicas y privadas, la asunción de responsabilidades y aporte de recursos económicos, técnicos y humanos para lograr las diferentes metas que se tracen en cada plan.
Igualmente asegura que es fundamental involucrar en estos procesos a las comunidades, especialmente grupos étnicos del Departamento, porque es una gran oportunidad para trazar el camino que se necesita recorrer en La Guajira.

miércoles, 1 de noviembre de 2017

SITUACIÓN DE POBREZA EN LA GUAJIRA NO DA MÁS, ES UNA BOMBA A PUNTO DE ESTALLAR

Las cifras ratifican lo que diferentes actores e investigadores venimos repitiendo hasta el cansancio a través de diferentes medios hablados y escritos, la pobreza de nuestras comunidades han alcanzado niveles inimaginables, estamos aportas de ser un territorio fallido, generando escenarios que afectan la institucionalidad del Estado colombiano y minan la confianza en nuestras instituciones y en el cual siempre pierden los más débiles.
Somos una sociedad mal contabilizada, donde ni siquiera sabemos cuántos somos, ocupando un territorio amenazado por la pérdida de capacidad de sustentabilidad e incapaz incluso de producir su propio alimento, amenazado por el cambio climático, la desertificación del territorio, y la minería extensiva, la pérdida de fuentes de agua y la desaparición de vocaciones económicas alternativas que generen oportunidades para todos.
Según cifras oficiales, el 58% de la población urbana se encuentra en situación de pobreza y un 25% en línea de pobreza extrema, pero a la población rural no le va mejor, el índice de pobreza multidimensional de La Guajira rural está en el 84%, llegando a extremos como Manaure donde este indicador alcanza el 91.2%, Dibulla con el 90.0%, Uribia con el 89.5%, Maicao con el 88.1%, Riohacha con el 81.9%, siendo estos municipios del norte donde se concentra el 78% de la población del Departamento (ver Censo Nacional Agropecuario).
Estas cifras se reflejan a su vez en los últimos resultados de la medición de empleo del Dane que señalan que el desempleo en Riohacha a septiembre de 2017 subió a 13.5% y la tasa de informalidad laboral alcanzó el 61,1%.
Sumémosle a esto la llegada masiva de población venezolana que huye de la crisis del vecino país, y que se ha asentado en La Guajira acrecentando mucho más la crisis.
Adicionalmente continúa la crisis humanitaria de niños y niñas que siguen muriendo por causas directas o asociadas a la desnutrición, las muertes maternas o los nacimientos de niños con baja talla y peso, que se explica en gran medida por los altos índices de pobreza en que viven nuestras comunidades.
Blanco es y gallina lo pone, dice el dicho, si una familia no tiene ingresos, si no tiene ingresos no puede comprar comida y si no compran comida pasan hambre, así de sencillo; entonces, la solución está en atacar la pobreza, para que las familias tengan ingresos y oportunidades y así puedan garantizar su bienestar general, y esa es en esencia, la función del Estado colombiano, tanto a nivel nacional, departamental como municipal.
La pregunta es: como lo hacemos?, como reducimos los niveles de pobreza y pobreza extrema?, como garantizamos derechos a nuestra población?.
Lo primero es convocar a todos los actores que tienen algún nivel de responsabilidad en el problema y sentarse a reconocer que la pobreza existe y que es una de las principales variables generadoras de la crisis guajira, en fundamental reconocer que está presente.
Lo segundo es dimensionarlo, lo que ya está hecho, hay mucha información útil que se puede aplicar de inmediato.
Lo tercero es diseñar una hoja de ruta, un plan marco de intervención, porque algunas variables para transformar estas realidades requerirán de acciones de corto y mediano plazo pero otras más estructurales serán de largo plazo.
Lo difícil será definir cuál será la o las estrategias, para ello hay que buscar actores que puedan generar ideas, si definitivamente no se encuentran en el territorio, habrá que buscarlas a nivel nacional y sí aun así no surgen habrá que buscarlas a nivel internacional, traer consultores especializados que aporten al diseño de esa hoja de ruta o plan macro, el nombre es lo de menos, para ello se puede pedir cooperación de la ONU, el Pnud, la Unicef, la Cepal, etc.; lo único cierto es que no nos podemos quedar cruzados de brazos viendo cómo se nos deteriora día a día nuestras sociedad y como nuestras comunidades caen cada día más en la crisis.
Convoquemos amigablemente al gobierno nacional, a los ministros, pero con propuestas e ideas serias, concretas y estructurales. Todo esto debe hacerse manejando los temas de la interculturalidad y de la multietnicidad de La Guajira.
En tal sentido, convoco a la Gobernación, a las Alcaldías, a las entidades descentralizadas, a la Asamblea Departamental y los Concejos Municipales, a la academia, a los centros de pensamiento, al empresariado, a que se convoquen, hagan un gran acuerdo social, y se comprometan a trabajar en equipo, a apartarse de pasiones políticas y celos profesionales, a trabajar como uno solo, para lograr superar este reto.
En tiempo de crisis es cuando debemos mostrar lo mejor de nosotros mismos, sacar a flote nuestras capacidades, ese debe ser el compromiso, se lo debemos a nuestras familias, a nuestros hijos, a nuestros vecinos y a nosotros mismos.

escribió:
Mauricio Ramírez Álvarez
administrador público, investigador temas sociales y étnicos
@mauricioadmpub

LA GUAJIRA CON 4 MUNICIPIOS CON RIESGO ALTO Y EXTREMO ELECTORAL

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