
Los docentes se
apostaron en las afueras de la Alcaldía de Maicao, impidiendo el ingreso de
quienes se dirigían al lugar, reclamando el tiempo adeudado y la nivelación
salarial.
En su problemática los
maestros indicaban que los unos acusan a otros, quedando el reclamo entre la
Unión Temporal, la administración municipal y el Ministerio de Educación, manteniéndose
la morosidad a los educadores.