“La
vida tiene sorpresa, sorpresa que da la vida…”, interpretado por el cantante
panameño Ruben Blades. Así es el fútbol, una caja de sorpresas. Cualquiera gana,
cualquiera empata, cualquiera pierde. También, ocurre que por muy encopetado
que sea el futbolista, mete o yerra un penal. Primero fue el argentino Messi,
para mí el mejor del mundo. Luego, el portugués Cristiano Ronaldo. Ahora,
correspondió a:
El
arquero en algunas ocasiones, brilla con luz propia durante 89 minutos, basta
una jugada desafortunada y pasa de la gloria al infierno. Eso le puede ocurrir
a cualquiera, sobre todo, aquellos que tienen la responsabilidad de meter y
fallan. Otros, tienen la responsabilidad de neutralizar los ataques que generen
peligro, pero una jugada desafortunada cambia el libreto, como ocurrió al buen
mediocampista de marca Carlos Sánchez, en el partido contra Japón. Apenas,
comenzando el partido penal y expulsión. Así, es el fútbol.
Quien
mejor que la Roca, se ha dado la pela para que no penetren el arco defendido
por David Ospina? Quien mejor que él, cerrojo de la defensa cafetera? A
Sánchez, le debemos en gran parte los logros obtenidos. Por ejemplo, siendo su
virtud la marca, ha tocado cumplir la función del 10 en múltiples ocasiones por
el planteamiento del profe Pekerman. Eso se lo debemos a su profesionalismo,
entrega y pundonor deportivo.
“La
vida tiene sorpresa, sorpresa que da la vida…”, caso Italia, Una de las grandes
potencias en la historia del fútbol. Luego de 58 años, que la selección no
participará en un Mundial, tras quedar eliminada en el repechaje europeo ante
Suecia.
El
caso, de la naranja mecánica de Johan Cruyff, hace cuatro años Holanda, fue
semifinalista y hace ocho finalistas. No está en el mundial.
Sin
ser potencia en fútbol, desde Italia 1990, la selección norteamericana no
faltaba a la copa del Mundo. La dejó en el camino la discreta selección Panamá,
dirigida por el colombiano Hernán Bolillo Gómez.
La
selección Chile, fue una de las grandes sorpresas. Vigente campeón de América,
con dos títulos consecutivos, y una de las selecciones revelación de Brasil
2014.
Ahora,
la fresa para el pudín y cerramos el tema con broche de oro, los alemanes, campeón mundial, Brasil 2014.
Acaba de salir en la primera ronda, eliminada por la modesta y desconocida
Corea del Sur. El fútbol, es así.
Si
miramos la lista de futbolistas que por luz propia deberían estar en el
mundial, tendríamos que decir “la vida tiene sorpresa, sorpresa que da la
vida”, por ejemplo: el español Álvaro Morata, el alemán Leroy Sané, el sueco
Zlatan Ibrahimovic y el colombiano Edwin Cardona, no están porqué el fútbol, es
así. La lista es larga.
El
fútbol, es así, “La vida tiene sorpresa, sorpresa que da la vida…”, estamos ad
portas de dar el gran paso mundialista: La clasificación a octavos. Antes, en
Brasil 2014, llegamos a cuartos de finales. Cualquiera que sea el resultado,
irrebatibles es que, con el profe Pekerman, Colombia no solo volvió a un
Mundial de fútbol, sino que repitió. Eso es bastante y amerita reconocimiento
de los 48 millones de colombiano.
El
partido con Senegal o ganamos o ganamos, no hay de otra. Y tenemos con que
ganar. Un grupo sólido, concentrado, optimista y ganador. El Tigre, recuperó su
confianza goleadora. Tenemos que atacar, y con qué, atacar. Los africanos, son fuertes,
rápidos, habilidosos; pero pésimos en defensa, razón por la cual en los
primeros 30 minutos debemos tener el partido liquidado. Eso, dependerá del planteamiento
del técnico.
Siempre
he sostenido que, el equipo ganador no se modifica. Eso esperamos en el
partido. Mi mayor preocupación es que el profe, para cada partido un equipo
diferente.
Adenda
única: Si queremos ganar, debemos atacar. Para atacar tenemos que contar con pequeñas
sociedades. Y que sepa, Quintero, James, Cuadrado y Falcao, son excelentes
socios.
escribió:
Ignacio Escudero Fuentes
exfutbolista
de la Selección Juvenil de futbol de Colombia, Chile 1974
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