En los años 50 y
60, en plena infancia e inicio de la adolescencia, alternaba mis estudios de
primaria en la escuela pública Las Américas, venta de fritos en las calles
polvorientas de Riohacha y el futbol en la cancha habilitada frente al cementerio
central, donde frecuentaban personas adultas como los hermanos Fuentes Fragozo,
Marcos Pedraza López, Los hermanos Bermúdez Cuan, Juan Palacio Brugés; Nicanor
Escudero Fuentes; infantes, como Carlos Romero Quintana el Kalinga; Carlos
Mejía, el Kalúa; Domingo Silva, el Bamba; Juan Vanegas, el Juan Pavita; José María Brito Celedón, el
Chema Conejo; entre otros. La congregación tenía un solo objetivo: jugar
futbol.
Este deporte más
hermoso del mundo, no necesita traductor, el que ha unido naciones y
continentes, que era exclusivo para los hombres. Las mujeres no solo estaba
vedada la práctica de dicho deporte, sino su presencia como simple espectadora.
Cualquier comportamiento distinto, sobre todo a quien se atrevía a patear un
balón o intentar participar en la línea como solíamos llamar a cada grupo,
recibían el calificativo de machorra.
Hoy, aun cuando la
realidad es otra, debido que la sociedad acepta así sea medianamente que las
mujeres practiquen el futbol, deporte considerado históricamente para varones,
todavía es evidente la intolerancia de la mayoría de la población, incluidas
las mujeres que no ocultan su rechazo a las niñas y adolescentes que muestran
un gran interés por esta disciplina deportiva, considerada la de mayor practica
y reconocimiento en el mundo. Incluso, es recurrente escuchar a padres de
familia expresiones como “el futbol es pa’ hombres, usted es mujer” y “las
mujeres que juegan futbol son “machorras”.
La realidad es que,
así como como han sobresalidos hombres futbolistas como Pelé, Maradona, Zico,
Pibe, Messi, Falcao, James; también contamos con mujeres que por su talento han
tapado la boca, a quienes pensaban que ellas eran torpes para jugar dicho
deporte.
Quien duda de la
categoría de Marta Viera Da Silva en Brasil, la denominada Pelé con falda. Por
su jogo bonito; el caso de Homare Sawa en Japón, una de las más grandes
mediocampistas de todos los tiempos, el 2011, fue su año de oro: campeona de la
Copa Mundial de Futbol, Bota de Oro a la máxima goleadora y Balón de Oro a
mejor jugadora de este mundial.
Mia Hamm en Estados
Unidos, su palmarés dos Copas del Mundo, dos medallas de oro Olímpico y cuatro
campeonatos nacionales de la Ncaa. Fue elegida como jugador del año de la Fifa en
2001 y 2002; Sun Wen en China, jugó cuatro Copas del Mundo y dos Juegos
Olímpicos, en el mundial de Estados Unidos de 1999, ella obtuvo la Bota de Oro
y el balón de Oro, elegida como jugadora del Siglo de la Fifa; y también está Yoreli
Rincón en Colombia, fue elegida como la mejor jugadora de la Copa América en
2014, la Fifa la destacó como una de las mejores jugadoras del Mundial de
Canadá.
Además, los
guajiros también tenemos a nuestra estrella en el futbol, se trata de la
superpoderosa villanuevera, Oriánica Velázquez, quien en su palmarés, cuenta
con la participación en la selección Colombia de futbol femenino en los Juegos
Olímpicos de Londres 2012. Hasta la fecha es la única futbolista oriunda del
Departamento de La Guajira, en participar en este certamen.
A nuestras mujeres,
no hemos regalado nada. Por el contrario, quienes se han destacado en esta
disciplina deportiva que se creía para hombres, el camino no ha sido nada
fácil. Ellas, con disciplina, dedicación, denuedo y pundonor deportivo se han
ganado su espacio, dignas de emular en el buen sentido de la palabra. Incluso,
han sido sometidas a las polémicas pruebas que la Fifa exige a las futbolistas
del Mundial de Fútbol donde tienen que demostrar que son mujeres.
Comenzó la segunda
edición de la Liga Águila Femenina, certamen que cuenta con 23 clubes
profesionales, donde nos deleitamos no solo con ver unas piernas hermosas sino
también auténticas crack del balompié de exportación.
Adenda única: Por
la calidad del futbol femenino a nivel mundial, en un futuro no muy lejano,
tendremos torneos de futbol mixtos; integrados por hombres y mujeres.
escribió:
Ignacio Escudero Fuentes
exfutbolista de la
Selección de futbol de Colombia, Chile 1974