Al finalizarse la necropsia se pudo establecer que la ballena perdió la
vida por falta de alimento, descartándose que la hubieran asesinado como se
indicó en un principio.
Los funcionarios del Grupo de Ecosistemas y Biodiversidad de la
Corporación Autónoma Regional de La Guajira, Corpoguajira, realizaron el
estudio del cuerpo del cetáceo, determinando que las contusiones encontradas en
su cuerpo no corresponden a impactos de balas, se estableció que son
producto de choques, posiblemente, con embarcaciones, lo que desmiente
completamente la versión inicial de su muerte.
Su llegada hasta la costa fue ocasionada debido al arrastre de la marea.
Es probable que el ballenato se haya separado del grupo de mamíferos marinos
perdiendo el rumbo; la falta de alimento lo fue dejando sin energías hasta
provocarle la muerte.
El neonato hallado tenía aproximadamente cuatro días de fallecido,
contaba con un año y medio de edad y medía siete metros de largo. El ballenato aún
era amantado por su madre.
Como se recordará, el pasado fin de semana fue encontrada una ballena de
Aleta, pequeña, sin vida a la orilla de playa en el área de Punta Ajuga, sector
Bahía Hondita, municipio Uribia.
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